MI SANO INJUICIO

17 de abril de 2020

Llamaste a mi puerta un amanecer lúcido de enero
Te abrió mi delirio
Se ocasionó un revuelo
 
Arriesgué al desafío
Volabas alto y con brío
El tiempo se hizo distancia
Me lanzaste al vacío

Ahora, en mi sano injuicio,
miro de nuevo tus ojos
En las profundidades de tu iris,
no me reconozco
 
Hoy echo a volar mis gritos
Enjaulados, se rendían ilesos
a tu sentido
 
Qué locura
Todavía cautiva de tus miedos,
abandonada a un duelo eterno,
vuelves a ofrecerme otras alas

Te contaré
Mi mente con taras apremia
la lección de vida equivocada
 
Qué locura
Hacer uso tuyo sin cordura,
Libertad

COMPARTIR